La patota gobernante le salió a contestar a Susana Giménez descalificándola miserablemente en una actitud intolerante verdaderamente fascista.
Releyendo el artículo 14 de la Constitución Nacional: "Todos los habitantes de la Nación gozan de los siguientes derechos...: ...de peticionar a las autoridades..."
Todo lo que dice la diva es lo que sentimos la inmensa mayoría de los argentinos. Los miembros del gobierno que saltaron como leche hervida, hablaron con resentimiento hacia una persona exitosa, a la que consideran representante de la década menemista. Los gobernantes tienen que tener respeto hacia los ciudadanos sin importar su origen o su situación financiera.
La respuesta lógica a la carta de Susana debería haber sido: "Tomamos nota de su reclamo agradeciendo sus sugerencias. Comprendemos su situación personal, sabemos que la inseguridad es uno de los principales problemas a los que nos enfrentamos y estamos haciendo todo lo posible para reducirla".
La metodología se repite permanentemente: Un día se publican declaraciones de alguien que no pertenece al gobierno, un miembro de la oposición, un funcionario de algún organismo multilateral o un simple ciudadano, y al día siguiente los titulares expresan:
DURA REPLICA DEL GOBIERNO A FULANO DE TAL.
Me tienen harto.
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